No hace mucho tiempo, en Junio del 2007 Henry Makow arriesgó su prestigio publicando un artículo titulado “Las Sociedades Secretas Chinas lanzan un reto contra los Illuminati”
El mes pasado, El Proyecto Camelot viajó a Japón para entrevistarse con Benjamin Fulford.
El hijo de un diplomático canadiense, Benjamin Fulford es la oveja negra de la familia y la edad de 17 viajó a la Amazonia para vivir con un tribu nativa. Vivió durante un tiempo en una comunidad argentina para comprender mejor a la sociedad occidental antes de asistir a la universidad en Japón.
Como persona de principios, valiente e idealista, dejó su puesto como Jefe Redactor de la Revista Forbes en Asia y Pacífico tras investigar un escándalo que el editor se negó a reportar. Investigando más en profundidad los asuntos globales, descubrió una compleja red de control financiero global en manos de Rockefellers y Rothschilds así como la realidad de la armas biológicas, tales como el SARS, capaces de enfermar y matar a personas con un perfil racial específico.
Fueron precisamente estos planes de despoblación los que no gustaron a facciones muy poderosas en Japón, Taiwán y China. Tras haber sido abordado por un Ninja (sociedad secreta japonesa), en el 2007 Fulford se convirtió en el primer occidental que en 500 años tuvo por primera vez acceso de admisión a las Sociedades Secretas Orientales, un grupo que consta de 6 millones de miembros. Convirtiéndose en su portavoz, lanzó un mensaje muy simple a los Illuminati en nombre de estas sociedades secretas.
“Reconoced que vuestro tiempo se ha agotado, dejad prosperar al mundo o, de lo contrario, tendréis que afrontar las consecuencias de enfrentaros con 100.000 asesinos profesionales”
Esto fue comunicado a través de Henry Makow y Jeff Rense en Julio de 2007.
Ahora la gente del Proyecto Camelot ha entrevistado a Fulford y el resultado es francamente interesante por todas los nuevos datos que salen a la luz. De nuevo lanzan el ultimátum a los Illuminati. Un ultimátum serio, real y que sigue en vigor.
En este video las partes 1 y 2 se centran en la historia financiera global y la historia personal fascinante de Fulford que le llevó al encuentro con los Ninja. La parte 3 contiene detalles del Ultimátum en sí mismo.
He aquí una trascripción de la primera parte traducido por Trinity a Tierra
El Ultimátum: Benjamín Fulford
Tokio, febrero 2008
Benjamin Fulford: El Señor Takenaka me dijo que se vio obligado a hacerlo porque Estados Unidos amenazó con golpear a Japón con la herramienta HAARP si ellos no lo hacían.
Kerry Cassidy: ¿y cual hubiera sido el impacto de ello? Díganos qué significó aquello para Japón.
Fulford: Un terremoto
…De manera que le pregunté. ¿Es eso cierto? (Y lo tengo grabado en cinta, también). Me dijo; Si. Para proteger el medio ambiente necesitamos reducir la población mundial en 2 mil millones de personas. Y una guerra no puede lograr esto, de forma que vamos a emplear la enfermedad y el hambre.
..Empleo “Rockefeller” como una abreviatura para todo este grupo de familias aristocráticas endogámicas. Es la cara Americana versus la cara europea. Los Bushes son parte de ello, por ejemplo.
…Tenía dos anillos. Uno era la máscara del diablo con cuernos y el otro parecía un anillo de boda. Y había una marca masona en la palma de la mano y me dice: Estos cuernos, pones un poco de veneno y se mi me tocas estoy muerto. Me dice que es un ninja, que quiere decir que es un asesino profesional
Y me dice: Sr. Fulford, si quiere ser un periodista rastreador de mugre, siga adelante y hágalo, pero estará muerto a la edad de 46 años. Por otro lado, tiene la opción de convertirse en Ministro de Finanzas de Japón, ¿de acuerdo?. De manera que me ofrece o bien la muerte o el empleo de Ministro de Finanzas.
….”Así es cómo lo describimos nosotros. Estamos saqueando el dinero de esa gente pero vamos a matarlos, ¿sabe?.” Y me dijo que la población de Japón se vería reducida a 70 millones. Permitirían que vivieran sólo 70 millones. Y necesitan cerca de 500 millones de asiáticos para seguir fabricando juguetes y esas cosas. Lo que él me describe es un genocidio en masa.
…Supongo que un montón de gente de la elite…seguro que ocurre con el Sr. Obama y el Sr. Clinton y mucha más gente a alto nivel de la política norteamericana, senadores, etc. Algún día todo el mundo les dará el mismo tipo de ultimátum. La muerte o la cooperación, de manera que o te unes a nosotros o mueres. Y de esa forma han llegado a obtener el control de los Estados Unidos y esclavizar a los americanos.
…tuve ese momento, que yo llamo ‘Kill Bill’. Hay una escena de la película donde estas dos mujeres luchan con espadas. Parece que va a ser una lucha larga y desagradable. No parece que parezca posible que tenga un ganador.¿verdad?. Pero una de las mujeres (la mala) tiene un parche en un ojo perdido. De repente, esta agarra el ojo de la otra y la deja ciega y se acaba la lucha.
Kerry: Sí, es increíble, Muy, muy gráfico
Fulford: Muy gráfico, pero pensé: ¿por qué no ir a por el Ojo de la Pirámide misma? Porque la mayor parte de los occidentales ni siquiera saben que existe.
…Me di cuenta de que La Sociedad tiene 6 millones de miembros y la Sociedad Secreta de Occidente, la cúpula de la misma, consta sólo de 10000 miembros. De forma que me dije. Ya está. !Tenemos a estos bastardos!. Y así me hice miembro de la Sociedad convirtiéndome en el primer occidental en ingresar en ella en 500 años.
Kerry: ¿Tenías guarda espaldas en ese momento? ¿Contrataste seguridad entonces?
Fulford: No. Si tienes la necesidad de contratar a un guardaespaldas, entonces es que ya es demasiado tarde. Tienes que operar a un nivel más alto. Quiero decir, si de verdad quieren asesinarme o dispararme, van a hacerlo. Lo que tienes que hacer es que no quieran dispararte.
La llave de la democracia es que la gente controle el dinero, y que el dinero no sea controlado por una elite secreta. Es el dinero al final lo que cuenta. SI pierdes el control del dinero, si está en manos de gente que no ves y no conoces, ya eres un esclavo. Eso es lo que tienes que recordar. Nunca jamás, deja que ningún poder secreto de una elite controle tu dinero al margen de ti.
¿Sabes? . Si van a intentar matar a miles de millones de personas, entonces vamos a tener que matar a 10.000 personas para prevenir esto. Es necesario. Y ya se han llevado a cabo todos los preparativos.
Comienzo de la entrevista
Soy Kerry Cassidy de Proyecto Camelot, y tengo el placer de estar aquí con Ben Fulford hoy, ex Director de Departamento de la Revista Forbes en Asia y Pacífico, lo cual es realmente fabuloso. Usted realizó ese trabajo durante 6 años, ¿no es así?
BF: Sí, cerca de seis años.
KC: Y usted estuvo viviendo y trabajando como escritor y periodista en Japón durante 20 años, ¿Verdad?
BF: Más que eso. Llegué aquí por primera vez en 1980 y realicé mis estudios universitarios aquí.
KC: Vaya, no conocía ese detalle. ¿Fue usted a la universidad de Tokio?
BF: Quizás debería darle una breve introducción sobre mi vida. Nací en Ottawa, Canadá en 1961 y cuando cumplí seis meses, mi familia se trasladó a Cuba. Mi padre era un diplomático canadiense.
KC: De acuerdo.
BF: Fue expulsado por Castro porque estaba ayudando a escapar a estos refugiados. Posteriormente viví en México hasta que cumplí los 8 años y de los 8 a los 16 viví en Canadá y fui a una escuela francesa. De forma que crecí hablando tres idiomas.
KC: Y usted hablaba español
BF: E ingles cuando era un niño y posteriormente francés.
BF: Posteriormente, me pilló el fin de la era hippy y recogí los ecos del pasado sobre lo que era la sabiduría popular, como oposición a todo lo que aprendí en la escuela. Y la calle venía decir que si habías ido a la universidad te habrían lavado el cerebro para convertirte en un consumidor y que evidentemente algo funcionaba mal en el mundo que los adultos habían construido. Aquella base era lo que hoy en día puede ser el Zeitgeist y, dado que yo había ido a la universidad, mi cerebro habría sido lavado con lo que decidí escapar. Fui al Amazonas a convivir con las tribus indias Shipibo.
KC: ¿Cuántos años tenías por aquel entonces?
BF: 17.
KC: ¿De verdad?. Vaya, aquello fue algo increiblemente arriesgado. ¡El Amazonas!
BF: Bueno, en realidad estas tribus habían sido caníbales
BF: Bueno, me sucedieron muchas cosas que ponen los pelos de punta. Una pistola en mi cabeza, estuve a punto de ser devorado por un oso, rodeado por lobos, toda clase de …
KC: De manera que fuiste al Amazonas, tenías 17 años y no ibas a la Universidad. ¿Qué decían tus padres de todo aquello?
BF: Bueno, ¿qué podían hacer en realidad?. Físicamente desaparecí.
(Nota Trinity; A partir de aquí omitiré los detalles de la entrevista, que es muy larga, que no tengan relación directa con lo que nos interesa aquí)
BF: Mi abuelo era lo que hoy sería un multimillonario y senador. Mi abuelo fue Miembro del Parlamento cerca de 20 años y mi padre embajador en varios países.
KC: De manera que usted estaría considerado como un “hijo de la elite”
BF: Por supuesto. Pero al mismo tiempo, tuve una infancia muy inusual ya que me enseñaron desde muy pequeño a tener mucha empatía. Y me impresionaron mucho las escenas que llegué a vivir en Méjico. Me refiero a la extrema pobreza. Nunca olvidaré cómo, a la edad de 7 años, me encontré con un niño en la calle, hablamos y jugamos. Éramos de la misma altura y del mismo de desarrollo mental, sin embargo él tenía 12 años.
Le pregunté a mi madre cómo podía ser aquello y me dijo que no tenía suficiente comida y le dije: ¿Cómo puede permitirse que esto ocurra?
Pues esto está ocurriendo a miles de millones de personas en el mundo. No se permite que su potencial se desarrolle, no están recibiendo educación adecuada, nutrición adecuada, asistencia médica. Nada. Es una vergüenza que se permita que estas cosas ocurran.
Tras el período en la Amazonia decidí dedicarle 3 años y media a viajar y a correr aventuras para compensar el no haber ido a la universidad. Leí todos los libros sagrados, el Corán, la Biblia, a Confucio, Lao Tzu, el Bhagavad Gita etc etc.
KC: De forma que usted estuvo estudiando filosofía oriental antes de llegar a Japón…
KC: ¿Había decidido entonces ya centrar sus estudios en economía?
BF: Simplemente quería aprender. No tenia en mente objetivos ni trabajos ni puestos. DE hecho, tomé todas las asignaturas que había disponibles. Economía, sociología, antropología, matemáticas, biología. Tomé clases hasta tercer grado en todas las asignaturas.
KC:¿Se graduó finalmente?
Finalmente me gradué por la Universidad de British Columbia en Estudios Asiáticos con una especialidad en un área China.
KC: ¿Cómo aprendió japonés?
BF: De dos maneras. Tomé un curso intensivo en la Universidad de British Columbia antes de ingresar en la Universidad y después, una vez en Japón, fui 3 días a una escuela japonesa hasta que me dije a mi mismo que aquello era inútil. Tomé un trabajo de barman en un bar japonés dirigido por un gángster.
Trabajaba de 9 a 5. Era la clase de lugar donde ocurren peleas y algunas veces entra gente desnuda, lo más bajo que puedes encontrar en Japón, básicamente. Pero lo bueno era que los borrachos suelen repetir una y otra vez las mismas cosas, hasta que finalmente coges todo lo que dicen.
(Risas)
También fui a lo que llaman la “Universidad Futon”. Me eché una novia que no hablaba inglés.
(Risas)
KC: ¿Escribe también en japonés?. ¿Puede leer en japonés?
BF: He escrito, creo, una docena de libros en japonés, algunos de ellos son best-sellers.
KC:¿Están traducidos sus libros al ingles?. Nos encantaría leerlos.
BF: No, no lo he hecho Deliberadamente me he centrado en el japonés estos últimos años, después de dejar Forbes porque sabía que estaba tratando con algo peligroso y aun no entendía suficientemente de qué se trataba.
BF: Recibí un aviso por ejemplo por parte de Makiko Tanaka, el anterior Ministro de Asuntos Exteriores y por la hija del Primer Ministro Kakuei Tanaka. Me dijeron: “si comienzas a entrar en estos temas, van a matarte. Así que sabía que había algo peligroso pero no sabía qué era exactamente, de manera que me escondí, por así decirlo, y comencé a escribir exclusivamente en japonés.
BF: Cuando trabajaba en Forbes yo había escrito una serie de historias acerca de los Yakuza, los gángsters y recibí un montón de amenazas de muerte por ello. El Jefe de Departamento de la revista Forbes en Moscú, Paul Klevnikov, fue disparado diez veces, fuera de su casa y llevado al hospital murió en el ascensor que se paró durante 8 minutos.
BF: Y por aquel entonces, algunas personas del periódico de Osaka y la televisión CBS me visitaron y me dijeron que el responsable del sindicato del crimen Goto estaba en el Hospital de la Universidad de Berkeley UCLA recibiendo un transplante de hígado. Aquello levantó en mi muchas preguntas interesantes. Una es cómo es posible que un reconocido gángster y criminal obtenga sin problemas un visado para viajar a los Estados Unidos. Otra es ¿Cómo es posible que un hombre de 70 años como él pueda pasar a los puestos de prioridad en la larga listad de espera para transplantes de hígado?
Y entonces comencé a pensar que tal vez estaba haciendo algún trabajo para la CIA y escribí sobre ello en Forbes. Y antes de esto, llamé a una fuente de alguien relacionado con el crimen y me advirtió que si escribía sobre aquello me convertirían en pasta de pescado. Le dije que yo no respondía a las amenazas, y que era un periodista muy conocido y que si me mataban ello les causaría un montón de problemas. Me dijo “no te mataremos, simplemente te haremos desaparecer. Ya puedes despedirte de tu novia porque no la volverás a ver nunca más”.
Y mencionó a un par de periodistas que habían desaparecido.
BF: Y entonces recordé que había un tipo, que había escrito sobre cómo la Banda Goto estaba traficando con drogas. La antigua secta religiosa Shinto importaba anfetaminas de Corea del Norte y se las vendía a la Banda Goto. Y el periodista desapareció poco después de escribir unos artículos como este.
KC: ¿Y nunca fue encontrado?
BF: Nunca. Han desaparecido un montón de ellos. Muchos periodistas japoneses me han dicho: “la única razón por la que sigues vivo es porque eres blanco. Si tratáramos de escribir nosotros sobre estos temas, estaríamos muertos.”
De manera que yo sabía que había gente muy peligrosa. Por cierto, el gángster que me dijo todo aquello, cuando le dije sobre el transplante de hígado, finalmente me dijo: “Mira, no podré hablar contigo de nuevo si escribes sobre esa historia.” Y pensé que esta fuente era demasiado valiosa que me había proporcionado un montón de información útil; era una conexión que no quería perder de manera que decidí no escribir sobre aquella historia.
Después de eso volé a Shajalin, en Rusia. El extremo oriente ruso donde está localizado todo el gas y el petróleo. Fui allí para escribir una historia y el representante local de esta banda estaba esperándome y me llevó a dar una vuelta. Me llevó a un casino gigante con cerca de 400 chechenios esperando fuera. Un poco como en las películas. Todos estaban armados y habían sido contratados por la banda japonesa como guardias de seguridad para sus casinos. Chechenios trabajando para los gángsters japoneses. Hay un montón de cosas ahi que no se ven en la superficie.
En Asia te das cuenta de que no existe división alguna entre los gángsters y el Gobierno. Es un continuum. En los Estados Unidos, partes importantes de la CIA son básicamente crimen organizado. Otra parte está formada por gente honesta que intenta defender a su país pero hay grupos dentro, como todos sabemos, que se dedican al narcotráfico y a todo tipo de actos criminales.
Bien, estaba en este “club” y este tipo esta sentado a mi lado. No es como el gángster que conozco en Tokio. Este es una especie de hombre de negocios de alto nivel. Es peligroso, no es una persona agradable y está muy, muy tenso. Le dije: “Mira. Quiero irme a casa”, y me dijo: “no, no es posible. Te van a matar”. Y en ese momento me di cuenta de que me estaban preparando un encuentro para matarme, de forma que pensé rápidamente; me dirigí amenazadoramente a los dos hombres del petróleo y les dije: “Vais a tener muchos problemas. ¿Ves a estos tipos?. Son agentes de la CIA y están protegiéndome. Además de eso, tengo un archivo que saldrá a la luz pública si me ocurre algo, con nombres e información para meteros a todos en la cárcel”.
Era un farol por supuesto. No tenía ese archivo y esas personas eran gente de negocios petroleros, para todo el mundo. Pero ¿qué podía hacer yo en ese momento?
Uno de los tipos se levanta, coge el teléfono y yo cojo mi teléfono para llamar al jefe de la banda y le digo: “No estoy aquí para escribir acerca de vuestros asuntos con los gángsters rusos y todo esto. Estoy aquí para escribir sobre la industria del petróleo y no voy a causaros ningún problema.” El tipo vuelve más relajado y le digo: “De acuerdo. Buenas noches” y eso es todo.
Bill: Suena un poco de película
BF: Lo sé, pero esta gente realmente dispara. Los chechenios dispararon a mi colega de Forbes, después de este encuentro.
Así que después de todo esto, realmente preparé un archivo, que aun tengo en mi poder, en discos duros y DVD con videos y grabaciones. Por ejemplo, un primer ministro japonés muy conocido ha asesinado a tres mujeres y tengo la prueba del asesinato de una de ellas. Un montón de cosas como esta.
Pero mi trabajo ahora no es intentar exponer a esta gente. ¿De acuerdo? Este no es mi objetivo. Es simplemente un seguro de vida que tengo.
Ahora ya no necesito ese seguro de vida porque tengo el respaldo de la sociedad secreta a la que pertenezco. Y, como he dicho, no es mi intención exponer a esa gente. Ya no estoy a ese nivel. Ahora estoy tratando de salvar este planeta.
KC: Entiendo
BF: De forma que todo este material nunca verá la luz probablemente mientras a mi no me maten. Si lo hacen, habrá horribles repercusiones de todo tipo; pero, lo único que intento es lograr una situación de win win para todo el mundo.
(…)
En la civilización, perdemos el contacto entre nuestro trabajo y nuestra comida y nuestra supervivencia. Hay tantas capas entre obtener alimento de la Tierra y lo que llega a nuestras bocas que a veces no somos conscientes. Esto es lo que aprendí en el Amazonas.
Y la otra cosa es que esta gente es mucho más sencilla en sus comunicaciones. Son muy directos. Dicen exactamente lo que piensan. De manera que si entras en una habitación y lo primero que piensan es que estás gordo, eso es lo que dicen. Cuando estamos en la civilización, todo resulta mucho más complejo. Te dicen: “tienes un aspecto muy saludable”, o algo por estilo.
KC: Su máscara no es tan marcada, quieres decir.
BF: Así es. Por otro lado estas personas han sido antes caníbales, de forma que los mayores estaban acostumbrados a comer carne humana cuando eran más jóvenes. Me explicaron que en la temporada de lluvias no podían pescar tanto pescado y la única forma de obtener proteína era comer a sus vecinos. Ahora sobreviven con pescado enlatado en la temporada de lluvias.
(Risas)
(…)
BF: Mi primer trabajo en Japón no fue con Forbes. Antes de esto, yo quería escribir una TOE (Theory of Everything) , una teoría de todo, pero es difícil pagar las facturas con algo así, así que acepté un empleo para una organización llamada Knight-Ritter que era parte de la cadena de periódicos Knight-Ritter.
Mi trabajo consistía en reunirme con ministros de finanzas y gobernadores del Banco de Japón. Escribía entonces sobre noticias de mercado y mis historias hacían que se moviera el dólar, el yen o las commodities en una u otra dirección. Era realmente increíble comprobar cómo se producía esto. Lo que aprendí entonces, como reportero del mercado financiero, es que las finanzas se basan básicamente en la psicología de masas. Es psicología moderna. Y fue una interesante lección que no te dan en el club universitario.
KC: Ahí aprendiste el poder de la palabra escrita, ¿no es cierto?
BF: Bueno, es la información y cómo todos tienen una historia que van siguiendo y van observando su desarrollo en busca de pequeños cambios. Por ejemplo, el Gobernador del Banco de Japón dice: “Bueno, puede que apretemos los tipos de interés un poco”. Y entonces todo comienza a moverse.
Incluso si hablamos de los mercados de commodities. Hay rumores de que China va a comprar petróleo o algo parecido y esa noticia hace que todo el mercado empiece a moverse.
KC: Pero cuéntanos algo sobre tu experiencia. Escuchamos una entrevista que te hicieron en la radio canadiense donde mostrabas un increíble entendimiento de la economía mundial; me pregunto dónde aprendiste todo lo que sabes sobre este tema.
BF: Bueno, por un lado por supuesto asistí a las clases universitarias sobre economía y todo esto. Pero básicamente durante 20 años he estado siguiendo y escribiendo acerca de ello. Quiero decir que todo el mundo viene a Tokio, presidentes y primeros ministros, ministros de finanzas. El G7 y todo esto.
KC: El G7 ¿está aquí ahora mismo quieres decir?
BF; Sí. Y he estado siguiéndolo durante 20 años a los más altos niveles. He entrevistado a gángsteres, ministros de finanzas, presidentes de grandes empresas, primeros ministros, presidentes de pequeñas empresas…
Ser periodista es una carrera en sí mismo. Te das cuenta de que la labor más importante que tenemos que hacer es la de filtrar. Tienes a tu disposición enormes cantidades de información y lo importante es saber extraer lo esencial y ofrecerla al público. Esa es la esencia de nuestro trabajo, ser un filtro de información.
KC: Pero hay otros periodistas financieros ahí fuera que sólo siguen la línea de partido. Y esto es categóricamente lo que tú no has hecho. Eres realmente un disidente en este sentido.
BF:Verás, se trata de alto nivel de propaganda lo que esa gente consume. Les han lavado el cerebro. Realmente no entienden, en su esencia, de qué va todo esto. Y este es el truco. Pretenden llevar a la gente hacia matemáticas exotéricas y encubrir la esencia con un montón de palabras complejas. Así que salen con palabras como “derivados” y conceptos que son tan complejos que la mayor parte de la gente no entiende qué significan. Les recuerdo, hace casi 15 años, hablando de “formaciones de compensaciones delta”, se meten a fondo en todo el aspecto técnico y todo ello les ciega.
Es como una confusión deliberada, en realidad. Porque en la esencia todo esto es muy sencillo.
La economía es gente trabajando para ganarse la vida. Y las finanzas se basan en el proceso de decidir qué queremos que haga la gente. E intentan, por todos los medios, que no comprendamos esto, especialmente en lo que se refiere a las finanzas.
Y esta es la clave de los problemas del mundo ahora.
KC: ¿Y cómo consiguió que Forbes no le presionara para escribir sobre esto o aquello?
BF: Ok, Le mostraré cómo fui descubriendo las cosas en orden cronológico. Eso será lo más fácil.
La primera cosa que note en Japón y que me dio la pista de que las cosas no eran como parecían fue cuando observé a la gente haciendo cola frente a una caseta. ¿Qué estáis haciendo?, pregunté. Me dijeron “estamos cambiando nuestros premios por dinero”.
Existe una GIGANTESCA industria del juego allí, con señales de neón en todas partes, que es básicamente ilegal. Sin embargo funciona abiertamente y en base a reglas. Por ejemplo, no importa cuánto puedas esforzarte, es muy difícil perder más de 1000 dólares al día en estos sitios.
Así que aquí tienes un sistema completo fuera del marco legal que conecta directamente a la policía, los gángsters y los hombres de negocio, fuera del así llamado “aparato legal”.
Esto es algo que me ayudó a darme cuenta de que había algo diferente en este país. No era simplemente una versión asiática de Canadá, como me parecía superficialmente. Tienen una Cámara Alta y una Cámara Baja, tienen sus Cortes y todo esto. Estructuralmente es lo mismo. Pero en esencia, es totalmente diferente.
Me di cuenta de que el llamado “sistema democrático legal” no es más que un “frente” para una estructura de poder REAL bien diferente.
BF: Fui aprendiendo todo esto en pequeñas dosis. Primero me di cuenta con el pachinko (nota: juego de azar que menciona antes). Un amigo mío fue golpeado por un gángster frente a una oficina de la policía. Fuimos a la policía y nos dijeron: “No deberíais pelear con gángsters”. Eso es todo. Y entonces me dije. “todo esto es muy raro”. Pero, de nuevo, pensé que esto estaba relacionado sólo con el mundo del juego y la prostitución, que es un sector muy turbio en todas partes.
No pensaba mucho en todo ello hasta que trabajé como periodista financiero. Es muy importante ser rápido. Si ganas a tus competidores por 30 segundos, se considera un gran logro. Y tienes que buscar de dónde emana el poder. Y, hablando, por ejemplo, con los burócratas en el Ministerio de Agricultura me dijeron: “bueno, si quieras saber realmente lo que está ocurriendo, habla con el Sr. Kato Koichi”.
Este era el hombre de poder. Y el que tomaba las decisiones entonces. Nos conocimos Una vez me nombraron “sustituto de bateador” para uno de sus discursos. Y llegó e dio su discurso y fue muy impresionante y después recibió un sobre grande de dinero en metálico. Le dije: “Oh, la política”
(Risas)
Después, pensaba que el Ministro de Finanzas era la fuente REAL de poder en Japón, eso era lo que la gente creía porque era el burócrata más poderoso. Pero cuando comencé a hablar con la gente en el Ministerio de Finanzas, me dijeron finalmente. “Si quieres saber lo que está ocurriendo, tienes que ir a Nomura Securities. Esto fue en los años 80. Es muy diferente ahora. Pero en los 80, durante la burbuja, Nomura Securities tenía una lista de gente VIP de 5000 personas. Y tenían a estos dos jefes, el gran Tabuchi y el pequeño Tabuchi, que posteriormente se probó estaban conectados a una gran banda de crimen.
Pero ellos tenían a todos estos periodistas, políticos, todo tipo de trepadores y les prestaban un par de millones de dólares y les decían “compra estas acciones”. Y cogían a todos los vendedores de país y a todas las conexiones periodísticas y les decían: “estas son las acciones que tenéis que comprar ahora.” Y cada ama de casa, cada doctor, cada pequeño comerciante compraba estas mismas acciones, el precio subía y los VIPs los vendían entonces. Y así era cómo ellos controlaban todo. Política.
KC: Pero dices que ahora es diferente, ¿en qué sentido?
BF: Son distintos jugadores, distintas formas de ofrecer y hacer dinero. Y de hecho, este es el núcleo del problema con el que nos enfrentamos. Pero haremos esto paso por paso porque es más fácil ver la historia completa entonces.
KC: De acuerdo.
BF: Para entonces yo ya era bastante cínico acerca de Japón pero el argumento decisivo fue el escándalo de los créditos Jusen Housing. Este era un grupo de empresas que prestaban dinero sólo en el mercado inmobiliario. Y después de que la burbuja inmobiliaria estallara, era la primera vez que se iba a emplear dinero de los contribuyentes.
Por cierto, en 1992 el Gobierno japonés ya sabía que tenía una deuda de 200 trillones de yenes. Pero los periódicos solo hablaban de 2 o 3 trillones. No fue hasta diez años después que admitieron finalmente la cifra total. Y esto es justamente lo que está ocurriendo en Estados Unidos ahora mismo. Sólo que no van a tener 10 años porque no tomaron prestado ese dinero de otros americanos, sino del resto del mundo. De forma que veréis que van a producirse cambios GIGANTESCOS en adelante. Pero llegaremos a eso también.
Bill: Hay una pregunta que me gustaría hacerte porque recuerdo que le dijiste a Jeff Rense que en tu opinión, la deuda americana ascendía a 120 trillones de dólares. Quisiera que me dijeras de dónde viene esa cifra.
Te lo digo ahora mismo. 66 trillones de dólares vienen de un estudio hecho por el Profesor Killborn que se publicó por la Junta de la Reserva Federal de San Luis en 2005. Y ese el dinero que la Reserva Federal le debe a los ciudadanos americanos, que prometieron pagar para cobertura sanitaria pública y Seguridad Social y cosas por el estilo. Está recogido en ese estudio. Puedes leerlo. Ahora, los otros 53 trillones de dólares es la cantidad de dólares en circulación fuera de los Estados Unidos. Si los sumas tienes 120 trillones de dólares.
Bill: 120 trillones de dólares es un montón de dinero.
BF: Efectivamente, y no sólo eso. Un producto interior bruto de 13 trillones de dólares. Esto es desde donde se desenmaraña todo el timo. Pero llegaremos a esto más adelante.
0 comentarios:
Publicar un comentario