La semana pasada recibí un correo electrónico de una persona que decía que necesitaba una aclaración: una semana hablo sobre limpiar la casa y seguir avanzando y a la siguiente hablo sobre el compromiso.
La estudiante escribió: "Sería bueno que nos dieras una fórmula para saber cuándo debemos empujar hacia adelante y cuándo debemos retirarnos".
Ya he escrito anteriormente que uno debe estar preparado para hacer ambas cosas: hacer lo que sea necesario pero estar lo suficientemente despegado para reconocer que el universo tiene algo mejor esperando para ti.
Sin embargo, mi mensaje electrónico de la semana pasada no se refería a relaciones o proyectos, sino más bien a nuestro camino espiritual.
La única cosa con la que debemos comprometernos, una y otra vez, es nuestro camino espiritual. El resto viene y va –personas, lugares y cosas– pero nuestra conexión y la sabiduría... eso nunca cambia.
La certeza es una conciencia fundamental en la sabiduría de la Kabbalah. En su libro 'Ser como Dios', mi hermano Michael escribe:
"Para que la Luz del Creador pueda revelarse, debe haber una vasija para recibirla. El nombre de esa vasija es certeza, y el nivel de Luz que se revela depende de la fuerza de esa certeza".
En otras palabras, la certeza no es un pensamiento positivo o un mantra personal. No es "Sé que él es mi hombre" o "Estoy seguro de que al final todo saldrá bien". El pensamiento positivo es importante, pero no es certeza.
La certeza es saber que el sistema funciona, y debido a que funciona, estoy en el lugar adecuado ahora mismo, independientemente de lo que parezca en el exterior. Y como estoy en el lugar adecuado, en el momento adecuado, a cada momento, necesito estar bien donde estoy, pase lo que pase.
¿Significa eso que puedo no estar con la persona perfecta? Sí. ¿Significa eso que puedo no estar viviendo en la ciudad perfecta? Sí. ¿Significa eso que necesito una segunda opinión? Sí. Pero también significa que debido a que estoy conectado a este camino, y por lo tanto a la Fuerza de Luz del Creador, el lugar donde estoy ahora es un peldaño hacia la persona, el lugar o la cosa perfecta.
Esta semana, utilizando aquí la secuencia correspondiente de los 72 Nombres, inyecta mayor certeza de que estás en el camino correcto, que estás conectado con la Luz y que estás en el lugar correcto, en el momento correcto, cada vez.
Y cuando te resulte difícil tener este tipo de certeza, pero sabes que al final las cosas estarán bien, trata de vivir 'en el final'. Te sorprenderás de lo más rápido que llegas 'al final' cuando lo hagas.
Todo lo mejor,
La estudiante escribió: "Sería bueno que nos dieras una fórmula para saber cuándo debemos empujar hacia adelante y cuándo debemos retirarnos".
Ya he escrito anteriormente que uno debe estar preparado para hacer ambas cosas: hacer lo que sea necesario pero estar lo suficientemente despegado para reconocer que el universo tiene algo mejor esperando para ti.
Sin embargo, mi mensaje electrónico de la semana pasada no se refería a relaciones o proyectos, sino más bien a nuestro camino espiritual.
La única cosa con la que debemos comprometernos, una y otra vez, es nuestro camino espiritual. El resto viene y va –personas, lugares y cosas– pero nuestra conexión y la sabiduría... eso nunca cambia.
La certeza es una conciencia fundamental en la sabiduría de la Kabbalah. En su libro 'Ser como Dios', mi hermano Michael escribe:
"Para que la Luz del Creador pueda revelarse, debe haber una vasija para recibirla. El nombre de esa vasija es certeza, y el nivel de Luz que se revela depende de la fuerza de esa certeza".
En otras palabras, la certeza no es un pensamiento positivo o un mantra personal. No es "Sé que él es mi hombre" o "Estoy seguro de que al final todo saldrá bien". El pensamiento positivo es importante, pero no es certeza.
La certeza es saber que el sistema funciona, y debido a que funciona, estoy en el lugar adecuado ahora mismo, independientemente de lo que parezca en el exterior. Y como estoy en el lugar adecuado, en el momento adecuado, a cada momento, necesito estar bien donde estoy, pase lo que pase.
¿Significa eso que puedo no estar con la persona perfecta? Sí. ¿Significa eso que puedo no estar viviendo en la ciudad perfecta? Sí. ¿Significa eso que necesito una segunda opinión? Sí. Pero también significa que debido a que estoy conectado a este camino, y por lo tanto a la Fuerza de Luz del Creador, el lugar donde estoy ahora es un peldaño hacia la persona, el lugar o la cosa perfecta.
Esta semana, utilizando aquí la secuencia correspondiente de los 72 Nombres, inyecta mayor certeza de que estás en el camino correcto, que estás conectado con la Luz y que estás en el lugar correcto, en el momento correcto, cada vez.
Y cuando te resulte difícil tener este tipo de certeza, pero sabes que al final las cosas estarán bien, trata de vivir 'en el final'. Te sorprenderás de lo más rápido que llegas 'al final' cuando lo hagas.
Todo lo mejor,
Yehudá Berg
