Afinación Diaria de la Conciencia: Publicado por Nebiros , lunes, 24 de marzo de 2008 at 10:32, in Etiquetas: Afinación de la Conciencia

Saludos a todos.

El día de hoy comenzaré a compartir con ustedes una serie de mails que me llegan diariamente y que provienen de la escuela de Kabbalah de Estados Unidos y el redactor es uno de los fundadores de la institución; Yehuda Berg.

Quiero aclarar algo que entendí después de haber estudiado un poco de esto que para practicar la Kabbalah no es necesario pertenecer a una religión o mas aún ser Judío. Si bien la práctica de esta doctrina como le llamaría yo tiene sus orígenes en la religión Judía, ésta se ha convertido en una práctica que puede ser llevada a cabo por cualquier persona de cualquier religión, raza, etnia, país, etc. Por lo que la discriminación no entra en ella.

En lo particular no converjo en muchos puntos con la forma de llevar a cabo muchas costumbres de los Judíos, pero ese es tema que no voy a llevar a fondo, no siempre se está de acuerdo con los sistemas de creencias pero ya es de manera personal aquél que quiera o no converger con ellos.

Y bien los dejo con la Afinación del Día de Hoy, un abrazo.

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LUNES 24 DE MARZO DE 2008

Un estudiante me escribió esta semana: "Los últimos dos meses he estado restringiendo en esta área específica de mi vida. Pero todavía no estoy viendo ningún cambio".

Mientras que la restricción es un buen comienzo, el estudiante se olvida de tirar los cálculos. Cuando nos sentamos y esperamos el resultado, éste nunca llega.

Un estudiante se dirige a su maestro y le dice: "Maestro, nadie me quiere". El maestro le dice: "Huye del amor y el amor correrá detrás de ti". Fácil. Dos semanas más tarde el estudiante regresa y dice: "No está funcionando. Estoy corriendo pero el amor no corre detrás de mí". El maestro dice: "Estás corriendo, pero continúas mirando sobre tu hombro para ver qué tan lejos está".

Hoy no mires hacia atrás, no mires hacia adelante. Sólo mira el trabajo espiritual delante de ti. Sométete al proceso y deja ir la necesidad de resultados. Como mi madre y maestra Karen Berg dice: "No persigas el amor. Si te ocupas en ayudar a los demás, el amor vendrá, como una mariposa, y se posará suavemente sobre tu hombro".